Sra. Amiga

Señora amiga, 

démonos un tiempo del fracaso 

ahuyente los demonios relatores del hartazgo, 

si dice que pinto mis cielos y los suyos ni mancho.  

Señora amiga, 

entreciérreme los brazos 

dilate sus ojos y de su vista me aparto 

elimine sus días conmigo y yo repito

esos mismos días tranquilo

en la abominable vida de permanecer esperando

poder percibir un mínimo aliento de su nuevo rastro.

Comentarios

Entradas populares